Trimarco afirmó que aunque el cotejo genético que buscaba determinar si un chico de 12 años era su nieto dio negativo "eso no significa que deje de buscar al hijo de Marita ni deje de luchar por los derechos de ese niño".
Hoy "he recibido las conclusiones del cotejo de ADN que buscaba determinar si un menor de 12 años era mi nieto o no. Los resultados de la comparación de los perfiles genéticos fueron negativos tanto para mí como para la que decía ser su madre, tal como figura en la partida de nacimiento del niño", confirmó Trimarco en un comunicado.
La dirigente social aclaró que "eso trae muchas consecuencias", pero que "en principio no significa que deje de buscar al hijo que Marita tuvo ni que abandone en ningún aspecto la causa" de su hija.
"Tampoco voy a dejar de luchar por los derechos de este niño y de los otros que se encontraban en la misma situación. Les han robado su identidad", afirmó.
Trimarco aseguró que seguirá "buscando la verdad. Espero que la Justicia haga lo que tenga que hacer: que se investigue a fondo la procedencia de la partida de nacimiento, que corrobore quiénes fueron los responsables de su emisión fraudulenta y del encubrimiento de la apropiación y, por sobre todas las cosas, que averigüe quiénes son los padres y qué circunstancias llevaron a que los menores terminaran en manos de esa gente", reclamó.
También pidió que la justicia "no se olvide de esos niños" y "procure su bienestar en todos los aspectos", para lo que se puso a disposición para colaborar "en todo lo que sea necesario".
La Justicia Federal de Córdoba informó en las primeras horas de esta tarde que resultó negativo el cotejo genético realizado el 11 de agosto entre el chico y los familiares de Marita Verón.
La notificación fue realizada por el juez federal Alejandro Sánchez Freytes, quien comunicó a las partes que "los resultados obtenidos en los marcadores genéticos" del niño " excluyen la posibilidad de que María de los Angeles Verón, hija de Susana Trimarco, sea su madre biológica".
El cotejo genético fue promovido a partir de datos acercados a la justicia por Trimarco, que referían que el chico, cuya identidad se mantiene en reserva, había sido adoptado y criado en un pueblo cercano a Alta Gracia, Córdoba, por Paola Ceballos.
La mujer es pareja de Gonzalo "Chenguita" Gómez, condenado junto a su mellizo, José "Chenga" Gómez, a 22 años de prisión por haber regenteado junto a su madre, Lidia Irma Medina, los prostíbulos de La Rioja donde Marita fue vista por otras mujeres también víctimas de trata.
En más de 12 años de búsqueda, esas mujeres fueron quienes dieron a Trimarco las primeras pistas sobre la posibilidad de que Marita hubiera dado a luz en cautiverio.
En el juicio de 2012 algunas de ellas volvieron a hablar del niño y señalaron como posible padre a Gómez, a quien Trimarco acusó de embarazar a su hija para "chantajearla", informó Infojus Noticias.
Autoridades de Desarrollo Social del municipio de Alta Gracia intervinieron y se acercaron al domicilio, donde constataron las condiciones de pobreza y vulnerabilidad en que vivía el pequeño y otros niños, también inscriptos "irregularmente", según comunicó entonces la Fundación María de los Ángeles.
También durante el debate oral de 2012, que terminó en escándalo por la absolución de todos los imputados del caso -sentencia revertida luego por la Corte tucumana-, una de las víctimas contó que conoció a Ceballos cuando la llevaron y obligaron a prostituirse en los locales que regenteaban los Gómez, los prostíbulos Candy, Candilejas y El Desafío.
En la sentencia de absolución, los jueces Alberto Piedrabuena, Emilio Herrera Molina y Eduardo Romero Lascano, concluyeron con "certeza" que Ceballos era parte del engranaje e "integraba una verdadera organización cuya finalidad era explotar la prostitución de mujeres".
Tras conocerse el resultado de ADN, la investigación tomará un nuevo rumbo porque aunque se descartó el vínculo del niño con la familia Verón-Trimarco, la presidenta de la fundación que asiste a las víctimas de trata afirmó que seguirá el caso hasta "saber quiénes son las madres" de los niños inscriptos irregularmente "y conocer toda la verdad".
Por el secuestro de Marita fueron condenados Fernando y Gonzalo Gómez, Mariana Bustos, Juan Derobertis, Cinthia Gaitán, Carlos Luna, Daniela Milhein, Alejandro González, Domingo Andrada y Azucena Márquez.